[Permanente] Guía Narniana
:: Lo que estuve escribiendo: Guía narniana para viajeros involuntarios
Publicado por Editorial Verbo Vivo en el 2006

Lewis es uno de esos escritores increíblemente buenos. Tal vez no a todo el mundo le gusten los temas que trata, peor hay que reconocerle algo: Sabe como encararlos. Lewis es inteligente para escribir no porque haga simple lo complejo, sino porque sin perder complejidad, sabe abordar los problemas con simpleza.

Cuando Patricia Vergara Andrianzen me propuso escribir un libro sobre las Crónicas de Narnia partiendo de una serie de artículos publicados en el sitio de Jvn, decidí redactarlo emulando el tono que Lewis usaba para escribir sus cartas: Cálido y cotidiano, como una suerte de conversación a la distancia.

¿Lo logré? Lo dudo. Les dejo el prólogo para que juzgen por ustedes.

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Locomotora Prologal
A vapor, claro

Trenes y viajeros
¿Viajaste alguna vez en tren? Me encantan los trenes. Vivo en una ciudad pequeña por donde circulan dos líneas de trenes. Cuando era pequeño, me gustaba verlos pasar con sus enormes locomotoras y sus vagones uno detrás de otro como una oruga a máxima velocidad. Y las vías, claro. No hay nada mejor que caminar por las vías muertas, esas por donde antes pasaban los trenes pero ahora ya no. Y, no me lo vas a creer, pero cerca de mi casa había un ramal que ya no funcionaba, así que las tardes de otoño me iba caminando despacito por las vías hasta llegar a un andén largísimo que daba a un estación abandonada con su tanque de agua y todo. Me sentaba allí, a veces sólo, a veces con amigos, ¿y sabes que hacía? Miraba pasar los trenes. Si nunca lo hiciste, te lo recomiendo. Es como comenzar un viaje pero sin moverte de tu lugar. Porque los trenes y las indispensables vías tienen eso, ¿viste? Parecen una invitación a viajar, a recorrer nuevas ciudades, a conocer nueva gente, pero también a pensar mirando como el paisaje corre a través de la ventanilla.

Por eso quería empezar este libro contándote sobre mi amor por los trenes, porque quisiera que para ti este libro fuese como mirar un tren pasar: No te movés de tu lugar, pero estás viajando con tu imaginación y con tu pensamiento. Suena bueno, ¿no?

Viajé muchas veces en tren. Algunos viajes, los mejores, lo hice con un amigo que quiero presentarte. Los que lo conocemos desde hace tiempo le decimos Jack, pero en realidad se llama C. S. Lewis. Leí la mayoría de sus libros viajando en tren y creo que eso estuvo bien, porque a él le gustaban los trenes. Así fue como poco a poco lo fui conociendo. Ahora somos viejos amigos, así que me invitó a hacer un viaje con él. En tren, claro. Un viaje en tren. Me dijo: «Por qué no traes un amigo» y yo pensé en ti.

Así que, si estás de acuerdo, ¿hacemos las valijas y nos vamos para la estación? ¡El tren ya está por llegar!

Dentro del ropero
Cuando vas a ver las Crónicas de Narnia, estás mirando mucho más que una película. El hombre que escribió las novelas era una gran persona, porque vivía lo que creía, algo que seguro te gustaría poder hacer. Este libro es para que puedan sacarle el jugo a Narnia conociendo todos sus recovecos, pero también para que te asomes a la vida de un hombre que hablaba de cosas que nos pasan a todos.

¿Alguna vez viste a un niño jugar? Tal vez ni siquiera es necesario que lo hayas visto, basta con que recuerdes alguno de esos maravillosos momentos que viviste con tus soldados o muñecas. Entonces, para ti jugar era todo, menos un juego. Parece rara, ¿no? Piénsalo bien: ¿Acaso las andanzas de los muñecos no eran lo más importante del mundo? ¿No sufrías con sus desgracias y celebrabas sus triunfos? Los niños saben algo que cuando crecemos olvidamos: Jugar es un modo de conocer el mundo y de aprender a pensar.

Por eso, cuando Lewis te propone un mundo lleno de seres fantásticos, está proponiéndote un juego que no es un juego. Porque detrás de Tumnus el fauno, de la Bruja Blanca y hasta de la familia de castores parlantes, se esconden ideas profundas que han sido el tema de filósofos y teólogos durante cientos de años. Pero todavía hay algo más: Lewis no se queda sólo en disfrazar ideas –como lo hacen, y muy bien, los hermanos Wachowski en la trilogía Matrix- sino que además te propone respuestas a esos problemas que todos tenemos y que nadie parece saber como resolver. Leer las Crónicas de Narnia es aceptar un desafío digno del mejor caballero medieval –o de Ripichip, por qué no-: Intentar saber recibir un poco de ayuda para ser un poco mejor.

Que no te quepa duda: Lewis era un sabio, pero no porque tenía todas las respuestas, sino porque sabía donde encontrarlas. Y como todo buen caballero, el autor de las Crónicas siempre tiene un tiempito entre combate y combate para sacarse el yelmo, apoyarse sobre su espada y explicarnos a nosotros, los novatos, como encontrar la fuente de la sabiduría, que no está tan lejos como algunos dicen.

¿No empezaba por otro lado?

Cuando Lewis comenzó a escribir la primera novela que compone la serie, no sabía que continuaría hasta llegar a los siete volúmenes. Por eso, no los redactó en el orden en el que suceden, sino que respetó únicamente lo que su imaginación le iba dictando. Luego, al ser consultado, recomendó leer las crónicas de Narnia en orden cronológico:

El sobrino del mago.
El león, la bruja y el ropero.
El muchacho y su caballo.
El príncipe Caspián.
La travesía del Aurora.
La silla de plata.
La última batalla.

Para realizar estos comentarios, hemos optado por este orden, puesto que fue el que prefirió el propio Lewis.

Cómo leer este libro
Creo que es de mal gusto decirles a las personas cómo deben leer un libro, pero puesto que éste es un libro que trata sobre otros libros, ¿por qué no hacer un par de sugerencias para que puedas sacarle el máximo provecho?

En primer lugar, ¿no es fascinante moverse de vagón en vagón cuando uno viaja en tren? Por eso, como ya estamos en pleno viaje, te propongo que recorramos los siete vagones que forman este convoy –me encanta esta palabra porque amo las películas de vaqueros–, cada uno de los cuales representa uno de los libros de las Crónicas. Cada vagón contiene detalles sobre la historia –no importa que no la hayas leído, porque hay pequeños resúmenes– y cómo ésta se vincula con la vida de Lewis. No hay otra forma de hacer amigos más que estar con ellos y conocerlos, así que estaría muy bien que consideres cada uno de estos capítulos como una posibilidad para charlas con Lewis. Al final, estoy seguro que serán grandes amigos.

Además, encontrarás al final de cada capítulo un pequeño apéndice titulado «Donde en Narnia dice…». Cuando uno se va adentrando en Narnia, empieza a comprender que muchos de los elementos con los que Lewis compone la historia representan otros de nuestra realidad. ¡Ojo! Esto no significa que todo lo que aparece en Narnia tenga su equivalente acá. El propio Lewis declaró en varias oportunidades que no fue esa su idea, sino más bien trató de contestar la pregunta «¿Qué pasaría si en un mundo con las características de Narnia sucediese algo parecido a lo que sucede en el nuestro?».

Los cuadros «Donde en Narnia dice…» te servirán para comprender cuáles son estos elementos y de qué manera se manifiestan en nuestro mundo.

Ahora sí, hechas estas aclaraciones, ¡toma tus valijas y prepárate que el tren no va a esperarnos un minuto más!

5 comentarios:

  1. hola!!!


    me paso a firmarle!!

    me encanto NARNIA

    MUI BUENA SU PAGINA

    BESOTES GDES


    PETYDEPP

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  2. Hola EZE!!! esta bueno lo que escribiste.. no lo lei todo de corrido... pero esta bueno!! a mi me encanta las Crónicas de Narnia... me vi las 2 pelis y ahora estoy leyendo los libros en los ratitos libres q tengo o me hago.... Bendiciones

    Ruthy

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  3. je Buena Guía, interesante... Me Gustó quisiera leerla completa pero -.-' tengo cosas que hacer

    Nos vemos (Literalmente)

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  4. Vamos, tomate un tiempo y leelo completo, que es sólo el prólogo. En la pagina de Tierra Firme (www.tierrafirmertm.org) podés escuchar algunos porgramas sobre el Príncipe Caspian y leer un artículo que es casi igual al capítulo del libro dedicado a este personaje.

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  5. Hola saludos desde México, esta interesante esto de narnia y sobre todo tomándolo con un punto de vista cristiano a la fe , a mi me gustaron los libros y sobre todo las películas, y por cierto espero tener un día la oportunidad de leer tu nuevo libro "sobre la convergencia" aunque yo creo que voy a tardar porque vivo en chihuahua, México y no está en ningun lado. Saludos!

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